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Actualidad: Advierten sobre los Efectos de la Vida Online para el Cerebro de los Jóvenes

Neurocientista de la Universidad de Oxford, baronesa Susan Greenfield. Al pasar mucho tiempo conectados, pierden la oportunidad de desarrollar sus habilidades sociales y se debilita su empatía. 

Por Sebastián Urbina, El Mercurio.

Sin desconocer las ventajas que tienen los medios digitales, Susan Greenfield, en su condición de baronesa del Reino Unido, ha alertado en varias ocasiones en la Casa de los Lores, en Londres, sobre los riesgos que tienen las nuevas tecnologías en el desarrollo del cerebro infantil y juvenil.

Como profesora de farmacología y experta en neurociencia de la Universidad de Oxford, le preocupa que los niños y jóvenes estén usando parte creciente de su tiempo en "vivir en este mundo cibernético artificial", según explica a "El Mercurio", desde su oficina en el Parlamento británico.

Su preocupación fundamental es que mientras más tiempo los menores están frente a la pantalla, inevitablemente es menos el tiempo que le dedican al mundo real, tridimensional, donde se usan los cinco sentidos.

"Es cierto que internet ha permitido aumentar el CI de quienes lo usan. Es algo que está documentado. En todo caso, es un reflejo de que la persona está procesando con mayor rapidez la información que recibe, pero no está poniendo a prueba su conocimiento o su sabiduría", explica.

Según advierte, una cosa es tener un CI alto y otra muy distinta es, por ejemplo, entender la crisis en el Medio Oriente o la actual situación económica.

-¿Cómo pueden impactar las redes sociales en las relaciones interpersonales de los más jóvenes?

"Cuando tú gastas más tiempo en las redes que te ofrece el ciberespacio, dejas de practicar el cómo darle un abrazo a alguien, escuchar los cambios sutiles en su tono de voz o leer su lenguaje corporal, que son las cosas importantes para desarrollar la empatía y el entendimiento para comunicamos con los demás".

"En el caso de las personas mayores -como mi madre, que tiene 85-, el que tenga Facebook sería bueno, porque estimularía su cerebro. Pero en un niño, que aún no tiene habilidades sociales y que tiene que ensayarlas, el mundo cibernético le quitará tiempo para desarrollarlas. Las personas de mayor edad tienen más experiencia en el mundo real, con amigos reales, y entonces es más probable que usen estas tecnologías en forma inteligente".

Todo esto, según Greenfield, también afecta la noción de identidad de los jóvenes. "Si tú te defines según el número de amigos que tienes en Facebook, si la importancia de lo que haces depende de si vale o no la pena ponerlo en esta red social, entonces, de alguna manera, estás viviendo una segunda vida, que no es real, que depende de los otros", asegura.

Esta especialista es enfática en llamar la atención sobre estos efectos. Para ella, la situación actual es similar a la de los años 50, cuando se sospechaba la relación entre el fumar y el cáncer de pulmón, pero no existían los estudios para confirmarlo.

En todo caso, recientemente, la U. Estatal de Michigan realizó un estudio con 1.400 estudiantes, con el que demostró una asociación entre el mayor tiempo de exposición a las pantallas y los crecientes problemas de déficit atencional entre los adolescentes y una disminución de su empatía.

Más aún, el propio Biz Stone, cofundador de Twitter, llamó hace pocas semanas a los 500 millones de usuarios de esta red a no dedicar tantas horas a ella, por considerarla "no saludable".

"Deberían visitar el sitio para buscar información, y cuando la encuentran, abandonarlo", dijo al diario The Guardian.

Para Susan Greenfield, ésta es una opinión de peso que viene de un gurú, y que llama a ser cauteloso con el mundo digital.

-¿Qué opina sobre la presencia de estas tecnologías en la escuela?

"Pienso que en educación, si tú simplemente pones computadores en las salas de clases, ésa no es la respuesta. La gente a menudo cree que lo es, y los políticos también piensan que ésta es una buena medida, porque luce bien".

"Pero, en realidad, lo mejor en educación es contar con profesores que sean inspiradores. Es muy difícil que a un alumno le guste una materia si el profesor es aburrido. Un profesor puede inspirar y estimular, cosas que no te da un computador. Si bien el profesor es imperfecto respecto de esta tecnología, en términos de los datos que conoce y de la exactitud de estos datos, la conclusión es que el computador debe usarse como un complemento, y no un sustituto del profesor".

Libertad v/s Control

Según Susan Greenfield, cuando se conocen casos brutales de bullying por la red, "uno agradece que se ejerza algún tipo de control o regulación".

Y agrega: "Lo que quiero dejar en claro es que si queremos tener menos control de los gobiernos sobre internet, debemos tener un público más responsable. O sea, hay que tener más educación que regulación, porque alguien educado es más probable que se ponga en el lugar del otro y no escriba cosas terribles. Si queremos libertad, debemos ser responsables".